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Las 5 verdades del kayakista seguro
 

     12. Sentido Común...

           Y algunas recomendaciones finales que deseo repetirte...

 

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.......A veces, es mejor dejar la navegación para otro día

El más común de los sentidos, es también muy importante a la hora de navegar en kayak.

Necesitamos aprender, y ser un kayakista seguro tanto por mi garantía personal, como para el grupo con el cual navego.

Y si tengo la sensación de que la navegación está por encima de mis posibilidades, siempre habrá otras oportunidades para salir a navegar en kayak de mar.

Pero si decido navegar, debo utilizar mis cinco sentidos y una buena concentración puestos en esos momentos de la navegación.

 

Deberás salir a navegar para acumular experiencia y solidez

 

Cuanto más salidas realices con monitores de reconocida experiencia, más aumentará tu seguridad personal y conocerás tus propios límites como kayakista, ya que si quieres ser buen kayakista, y parece obvio decirlo, deberás palear mucho en kayak y cosechar tus propias experiencias. Y recuerda, este es el único camino para sentir máxima seguridad en el agua, es decir palear mucho.

Lo ideal es que realices tus salidas a navegar con kayakistas de reconocida experiencia. Para ello no necesitas más que apuntarte en las excursiones y expediciones que organizan las empresas de kayak de mar y turismo aventura, que ofrecen sus servicios principalmente por la costa española y en nuestro caso, la bellisima costa catalana, donde serás dirigidos o guiados por uno o varios monitores, de acuerdo a la cantidad de aventureros.

Creo importante que cuando contrates este tipo de servicio, solicites a la empresa un breve curriculum de los monitores a cargo para poder aprovechar sus conocimientos y de esta forma transformar un "simple paseo en kayak" en un verdadero curso de perfeccionamiento personal, utilizando el derrotero de navegación para poner en práctica todas las técnicas posibles de kayak de mar, ya sea escorando el kayak, surfeando en olas, practicar los apoyos laterales, la marcha atrás, el pasar entre piedras y hasta el esquimotaje.

Seguramente en alguna de estas salidas te encontrarás con mal tiempo, quizá lluvia, olas o viento fuerte, y si bien estas no son las condiciones ideales de navegación, comenzarás a reconocer tus propios límites, compararás que equipamiento hubiera sido ideal para este tipo de navegación y de esta forma te irás equipando, renovando material y porque no, darte el gusto de comprarte esa pala, ese chaleco salvavidas tan bonito o ese chubasquero de colores raros que algún día has visto o probado y quedaste con las mismas ganas de tenerlo como cuando eras un niño y deseabas un juguete nuevo.

Porque de esto se trata el navegar en kayak de mar, mantener el espíritu fresco, la mente serena, volver a sentirnos como un chaval de diez o doce años lleno de ilusión y con la única ambición de realizar una paleada mas serena, suave y armoniosa que apenas produzca un movimiento de agua.

De allí en más, acumularás experiencias, e iras mejorando tu técnica, el equipo personal, ya que el avance de materiales y tecnología hace que lo que hace solo diez años era un imposible, hoy está al alcance de cualquier persona, como las cámaras de fotos, de video o los GPS para deportes acuáticos o también los localizadores personales.

En mis comienzos intentar realizar una filmación desde el kayak, o hacer una buena fotografía era casi imposible, y todo el material además de ser muy caro era muy delicado, de grandes dimensiones y de difícil transporte seguro; en cambio actualmente existen infinidad de modelos de pequeñas cámaras de fotos o video acuáticas con excelente definición.

Sin embargo, también podrás constatar que el mejor equipamiento no es ningún aval de que las cosas salgan siempre bien, y que la práctica, el error, el estudio del problema y la rectificación, son escenciales para una buena fotografía, un buen video y claro está para disfrutar una buena navegación.

Además comprobarás que lo más importante es el hecho de salir a navegar y disfrutar de los dias previos, los preparativos, disfrutar el día o dias de navegación y la satisfacción del regreso con el equipo básico que tengas a mano, porque esto es lo que te hará crecer dentro del deporte.

También ten presente que el mejor equipamiento, el más caro, no te hará tener una técnica más definida ni creará en tí la sensación de seguridad deseada, sino que solo la experiencia que iras logrando con el correr de los años de paleo será tu única garantia de buen aprendizaje.

El éxito en una expedición no sirve de gran cosa por sí mismo. Es solo la marca de un trabajo bien hecho, pero una vez que lo hayas conseguido, mételo en un armario de los trofeos y pasa a la planificación de la salida siguiente, comenzando la nueva planificación y logística desde cero.

El Mar y sus imprevistos

Cuando tenemos como objetivo realizar excursiones en kayak de mar, lo primero que deberemos tener en cuenta, es recordar que entraremos en la inmensidad del mar donde todo es posible.

Ya sabes que no es aconsejable la navegación en solitario, aunque toda persona que se considere kayakista, tarde o temprano realizará una navegación en solitario para "probarse" y sentir la sensación de estar vacío e indefenso en la grandiosidad de la naturaleza. Debemos entonces considerar e interpretar al mar como el lugar físico principal por donde nos moveremos, pudiendo en algunos casos transformarse hostíl, sobretodo si lo combinamos con algún cambio climático brusco o aumento del viento, y lo que podría haber sido un paseo placentero al sol, en poco tiempo puede transformarse en la peor de las pesadillas. Incluso en la muerte. Los máximos exponentes de la aventura mundial siempre remarcan que el primer objetivo de cualquier salida, excursión o expedición, por más pequeña o grande que sea, y aunque parezca obvio, es volver a casa, y toda toma de decisiónes deberá conllevar este sello de verdad. Cumplir el objetivo es importante, pero más aún que lleguemos entrero a casa.

La otra cara de las cuevas en los acantilados de Asturias

Para poder realizar esto a cabo, debemos tener presente que todo grupo expuesto a una determinada excursión o expedición debe responder, si no quiere verse envuelto en cambios de opiniones, confusiones y mas luego discusiones que pueden llevar a riesgos innecesarios, a un orden de tipo piramidal, es decir, una cabeza visible reconocida por todos a modo de Capitan como normalmente se denomina y reconoce, que será el responsable y como dijimos, único que tomará las desiciónes. Claro está que si navegamos en solitario, nosotros mismos somos nuestro Capitán y si no contamos con la experiencia necesaria puede causarnos problemas y es por ello que será necesario agregar como parte de nuestro equipamiento principal, un teléfono móvil con carga suficiente dentro de una bolsa estanca del tipo Aquapack, es decir de estas con las que puedo si hiciera falta, hablar y pedir ayuda sin necesidad de sacar el móvil de su funda, porque debemos recordar siempre que el peor peligro del kayakista es la hipotermia generada por el frío, o lo que es peor aún, la sensación de frío e intranquilidad que conlleva no ser un kayakista seguro.

Por ello recomendamos navegar en grupo.

La navegación en grupo

Desde ya consideraremos que las cualidades que debe tener el o los monitores/guias son buenas como así también el perfil profesional de los mismos, y por lo tanto debemos confirmar que será él y solo él, la persona que decidirá la realización o suspensión de una salida en kayak, asi como también el avanzar y continuar hacia adelante, hacia nuestro próximo objetivo o retroceder al punto anterior de partida o al lugar mas conveniente para dar seguridad a todo el grupo, concepto este más conocido como “ruta de escape”.

La ruta de escape es justamente esto, un lugar físico donde poder desembarcar en caso de alguna emergencia, cansancio, frío o presencia de un repentino temporal, y lo ideal es que en cualquier navegación en kayak, tengamos la certeza de poder arribar, desembarcar estar seguros en algún lugar anterior al objetivo.

Para poder realizar esto a cabo, debemos tener presente que todo grupo expuesto a una determinada excursión o expedición debe responder, si no quiere verse envuelto en cambios de opiniones, confusiones y mas luego discusiones que pueden llevar a riesgos innecesarios, a un orden tipo piramidal, es decir, una cabeza visible reconocida por todos a modo de Capitan como normalmente se denomina y reconoce, que será el responsable y como dijimos, único que tomará las desiciónes.

Para esta toma de desiciones, el Capitan normalmente cuenta con un grupo de personas que van como monitores o ayudantes que serán tantos como necesite el tamaño del grupo de excursionistas y de acuerdo al grado de dificultad de la excursión, los cuales deberán tener presente la responsabilidad que tienen en este tipo de salidas en kayak de mar.

Principalmente ellos también serán vistos como referentes y por lo tanto, no son participantes menores de la misma, sino eslabones muy importantes de una cadena que debe funcionar coherentemente y en armonía, no pudiéndose poner a la altura de un participante común.

Para que el grupo se sienta ordenado, alguno de estos guías secundarios o el pripio Capitan, debe siempre ser de los primeros en salir a la mar, tanto asi como primero en llegar a una playa, puerto o cala.

Este concepto debe respetarse porque al salir, siempre tenemos algún retrasado, algun kayakista que acomoda los points de su GPS, que no está cómodo en la bañera, que no sabe donde dejó las llaves del automovil, o que el reposapies le queda corto o largo y no puede acomodarlo, y al llegar, sobretodo si hay un poco de olas, este monitor ayudará a los menos diestros a bajar del kayak, sin consecuencias personales o del equipo.

Cuanto más grande es el grupo, más ordenamiento debe haber, ya que los números dicen que el porcentaje de iniciados, principiantes e intermedios, en una excursión supera ampliamente a aquellos que son avanzados o expertos. Y no está demás decir que en una expedición de expertos, también debe regir un orden piramidal, es decir si son solo cuatro personas por ejemplo, debe haber un capitan, que es generalmente el que presenta la expedición, y un subcapitan, que evitarán que en los momentos de riesgo el grupo se disperse o se confunda innecesariamente.

De este último párrafo se descarta la posibilidad de una dirección conjunta en cuanto a la toma de desiciones para recorridos en kayak de mar, y se pone de manifiesto que toda salida debe tener un solo “Capitan”, al cual de buena o mala gana se deberá obedecer y seguir, pudiendo los más experimentados si los hubiera, aportar sus conceptos o dudas en privado, pero nunca ponerse contra él y menos aún, separar el grupo si no hubiera causa que así lo justifique. Es necesario que estos conceptos básicos sean manifiestados antes de cada partida, y quede muy claro a todos los participantes porque ya en medio de las olas y con algunos “volcados” o nadando por el agua, la toma de desiciones deberá ser única y precisa.

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Y si viene la noche...

Recordemos también que cuando navegamos en grupo, no todos estamos acostumbrados a ir paleando en kayak de mar por la noche.

Puede ser que alguno de nuestros compañeros ocasionales no esté debidamente adaptado a este tipo de navegación, y por verguenza no quiera advertirnos de sus miedos, lo que puede implicar un riesgo innecesario para todos.

Si quisiramos navegar de noche, o presentimos que no llegaremos a destino como lo planificado, es necesario tomar las precausiones antes que nos pille la oscuridad y mínimamente tener una linterna a mano y equipo de abrigo, mantenernos juntos durante la navegación y estimar tiempos de llegada a nuestro próximo punto de desembarco.

En definitiva, estar muy bien preparados o buscar una ruta de escape para llegar a tierra lo antes posible, anticipandonos a la noche priorizando siempre la integridad de todo los participantes.